Gramsci muestra que el poder no solo se vale de la coacción coercitiva, sino también de la dirección-asentimiento, es decir de toda una serie de valores, creencias, conocimientos y concepciones ideológicas que sirven para que la mayoría de las personas acepten el poder establecido. Así Gramsci insiste en la importancia de la superestructura para establecer la hegemonía de una clase social sobre otra. Incluso afirma que la burguesía puede mantenerse...